- Patronal Salmonera exige 10 puntos para modificar Ley Lafkenche y acomodarla a sus intereses expansionistas en la Patagonia.
- Salmoneros demandan mayor requisitos a las comunidades pero las comunidades responden que a la industria ni siquiera le exigen Estudios de Impacto Ambiental.
- «La gran mayoría de estos capitales no son ni chilenos. Entonces no se justifica que capitales que vienen de Noruega, Japón, China, Canadá, vengan a cuestionar el derecho de las comunidades que han vivido milenariamente» en esta zona dicen dirigentes Mapuche williche.
Puerto Montt, 02 de mayo de 2024. (radiodelmar.cl)– En el contexto de la masiva campaña comunicacional y política que la industria salmonera ha implementado para debilitar, bloquear y anular la Ley Lafkenche (20.249), que devuelve espacios costeros a pueblos originarios, dirigentes indígenas rechazan las intensiones de los industriales del salmón y exponen las razones de defender esta Ley que por primera vez da derechos de administración a las comunidades.
La industria salmonera planteó en la Cámara de diputados modificar la Ley Lafkenche y propuso 10 exigencias entre las que se encuentran: aumentar los requisitos de admisibilidad para optar a un ECMPO, limitar el espacio solicitado, prever la caducidad, rechazar ECMPOs que se sobrepongan a áreas protegidas, y establecer silencio administrativo negativo en caso de que Conadi no se pronuncie dentro del plazo establecido.
Datos de la consultora Pivotes de 2024, indican que los procesos de asignación de una ECMPO (las solicitudes aprobadas) promedian 5,94 años de tramitación. Hasta el momento, se han decretado 34 ECMPO, mientras que las solicitudes pendientes alcanzan 109, con una concentración mayor en la región de Los Lagos con 78.
Respecto a la industria salmonera, de las 1.501 concesiones de acuicultura que se encuentran en trámite, 519 se sobreponen con solicitudes de otorgación de ECMPO, lo que equivale a un 35% del total.
Salmoneros exigen mayor requisitos a las comunidades pero a la industria ni siquiera Estudios de Impacto Ambiental
Consultadas comunidades que han estado en el proceso de solicitud de Espacios Marinos Costeros, coinciden en que se han enfrentado con un laberinto de tramitología y con un gran taco cuando pasan por las vías de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena, la Conadi.
Frente a las exigencias de mayores requisitos y otra serie de trámites que exige la industria salmonera, la dirigente de comunidades Mapuche Williche de Hualaihue, Chiloé continental, Yohana Coñuecar, dijo a radiodelmar.cl que «ya que la industria está solicitando una mayor rigidez para la solicitud del espacio costero (para comunidades indígenas), nosotros como ciudadanía debiéramos exigir estudios de impacto ambiental para cada una de las concesiones que tienen en el sistema en solicitudes de concesiones».
«A los salmoneros no se le está pidiendo un estudio de impacto ambiental, ingresan sus solicitudes por una mera intención de calificación ambiental».
«Entonces, este acto a mí me parece en lo particular bastante racista y discriminatorio, me parece incluso sesgado». Un estudio ambiental para las concesiones debería resolver además «si efectivamente sus actividades económicas son compatibles con la cultura de las comunidades costeras».
Toda esta situación «está hablando de que hay un poder racista basado en la economía salmonera en contra de las comunidades», dice Coñuecar.
Industria transnacional con interés total en la Patagonia y con apoyo del gobierno y de parlamentarios
Por su parte Daniel Caniullan, de las comunidades de pescadores Mapuche Williche de Melinka, la primera isla en la parte norte del archipiélago de las Guaitecas, afirmó que «la industria salmonera le tiene puesto los ojos a toda la Patagonia, los canales, los fiordos que hoy día sustentan a las comunidades indígenas y a la pesca artesanal».
Caniullan quien es integrante de la comunidad Pu Wapi, agrega que «la industria del salmón no es compatible con el medio ambiente, está generando un problema a los bancos naturales, el erizo que el 2022 tuvo un tremendo valor, productos de buena calidad, eso ya pasó a la historia debido a que el recurso ya no tiene la misma calidad que antes».
Y la industria en vez de estar preocupada de sus salmones esta preocupada de modificar la ley Lafkenche. Deberían preocuparse primero en arrojar menos químicos y antibióticos y pesticidas al mar. Deberían preocuparse primero de por qué instalaron sus concesiones donde hay banco naturales, caladeros de pesca, donde hay puertos de refugio.
Y la gran mayoría de estos capitales no son ni chilenos. Entonces no se justifica que capitales que vienen de Noruega, Japón, China, Canadá, vengan a cuestionar el derecho de las comunidades que han vivido milenariamente por los canales.
Yo creo que el gobierno más encima le presta ropa y hay una bancada salmonera defendiendo los intereses de capital extranjero.
Consultado el dirigente acerca de cómo enfrentar el avance salmonero, respondió que «hay tratados internacionales que se deben respetar. Por lo tanto, por muchas intenciones que quieran modificar la ley, se tienen que respetar los tratados internacionales».
Además «la solución no pasa por modificar la ley. La solución pasa porque los tiempos que establece la ley no se están cumpliendo. Pero eso no es culpa de la ley, es culpa del estado chileno que no pone los recursos suficientes para resolver estos asuntos».*****FIN*****