Artículo científico explica que la fertilización con “fósforo” en viveros es de vital importancia para que especies como el maqui y quillay, entre otras, resistan la falta de agua en un escenario de cambio climático. Mejor crecimiento, raíces más fuertes y más contenido de nutrientes son algunos de los beneficios que este método de regeneración de especies en viveros.
Fuente: Uchile.cl Noticias
30 de septiembre de 2025
La restauración de ecosistemas en la zona central del país enfrenta el desafío de generar plantas fuertes y resistentes a las condiciones de escasez de agua que son cada vez más intensas. En ese contexto, los investigadores buscaron entregar una respuesta con esta investigación que fue publicada en la revista Plants en la que las especies seleccionadas para la investigación fueron maqui (Aristotelia chilensis) y Quillay (Quillaja saponaria), árboles típicos del bosque de la zona central del país.
Así, el objetivo del estudio fue probar dos prácticas que se ocupan tradicionalmente en vivero, una es la aplicación de fertilización fosfatada -con el fósforo como nutriente principal- y la otra el uso de poda química de raíces que utiliza cobre en las paredes de las cavidades de la bandeja donde van las plantas y que evita el crecimiento excesivo de raíces.
Ambas técnicas mejoran aspectos morfológicos (como el crecimiento en raíces) y fisiológicos de las plantas, generando plantas de mayor calidad para las condiciones que se dan luego de “transplantadas”.
“El resultado principal del estudio fue evidenciar que para ambas especies la fertilización con fósforo aumentó el crecimiento, la biomasa y el contenido de nutrientes, siendo más consistente su efecto que la poda química de raíces”, destaca el investigador Juan Ovalle, académico y Director de Investigación de la Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza (FCFCN), uno de los participantes de la investigación.
Bajo condiciones controladas en invernadero se usaron ejemplares de nueve meses que fueron evaluados a los 12 meses de edad. Así en el caso del maqui, la adición de fósforo incrementó significativamente la longitud y el volumen de las raíces de tamaño medio. Para el quillay, una especie endémica de gran importancia ecológica, la fertilización con fósforo fue aún más beneficiosa, aumentando tanto la longitud como el diámetro de las raíces, como el volumen de las raíces finas y medianas.
Para evaluar el impacto de los tratamientos, los investigadores recolectaron y analizaron las plántulas al final del experimento (a los 12 meses de edad). Se centraron en mediciones que reflejaban la calidad y el potencial de las plantas para sobrevivir en el campo.
Así, las principales variables evaluadas fueron la morfología de la raíz, utilizando análisis de imágenes, se midieron características como la longitud, el área superficial, el volumen y la distribución de las raíces por diámetro. Además, se verificó el contenido de nutrientes en las hojas y raíces y los atributos de la calidad de la planta en que se midió la altura, diámetro del tallo, entre otros aspectos.
Métodos para mejores especies
“Phosphorus Fertilization and Chemical Root Pruning: Effects on Root Traits During the Nursery Stage in Two Mediterranean Species from Central Chile” (“Fertilización con Fósforo y Poda Química de Raíces: Efectos sobre los Rasgos Radiculares Durante la Etapa de Vivero en Dos Especies Mediterráneas de Chile Central”) es el título de este artículo en que participaron instituciones como la Universidad de Concepción, Universidad de Chile, Instituto Forestal (INFOR), CAPES, Tecnológico de Costa Rica a través de las y los especialistas Fiorella Calderón; Carolina Álvarez-Maldini, Manuel Acevedo; Manuel Sánchez; Kasten Dumroese; Antay Sierra-Olea; Juan Ovalle y Edwin Esquivel-Segura.
“De esto se podría desprender que la poda química no siempre ayuda a detener el crecimiento de raíces, que es el propósito principal de esta práctica usada en vivero”, detalla el académico Juan Ovalle, cuestión que podría inducir directamente en la preparación de las plantas para afrontar las condiciones adversas del cambio climático en la zona central del país.
Así, según detalla el artículo, en términos de aplicaciones prácticas para viveristas, ajustar dosis de fósforo según la especie puede mejorar la calidad de las plantas y su desempeño en terreno, mientras que la poda química de raíces debería evaluarse caso a caso, ya que no siempre aporta beneficios y puede implicar costos innecesarios.
Escritopor: Michael Seguel, periodista
Facultad de Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza