En una nueva jornada de resistencia, comunidades mapuche y de pueblos originarios marcharon en todo Chile y Abya Yala para denunciar el nuevo rostro del colonialismo: el extractivismo. A más de cinco siglos del despojo iniciado en 1492, las voces territoriales exigen justicia, autonomía y el fin de la devastación de la Ñuke Mapu.
Por Redacción DiarioMapuche.cl – 12 de octubre de 2025
El 12 de octubre de 1492 marcó el inicio de una larga operación de despojo: la ocupación violenta de los territorios indígenas, la evangelización forzada y la subordinación política de los pueblos originarios. Aquel proceso, presentado como “descubrimiento”, significó en realidad la ruptura de comunidades, el saqueo de la Ñuke Mapu y la fragmentación de las lenguas y memorias ancestrales.
Cinco siglos después, ese patrón vuelve con nuevos nombres y tecnologías: hoy la conquista se disfraza de proyectos energéticos, forestales, salmoneros y mineros que degradan los ecosistemas y desplazan comunidades, mientras el modelo neoliberal promueve una competencia individualista que erosiona lo colectivo y normaliza la devastación ambiental.
El resultado está a la vista: ríos intervenidos, bosques reemplazados por monocultivos, mares sobreexplotados y comunidades presionadas a migrar o endeudarse. Una crisis socioambiental que no respeta culturas ni territorios y que reafirma la vigencia del mismo patrón colonial bajo otras banderas: inversión, progreso, crecimiento.
La respuesta: defender la vida y el territorio
Frente a este escenario, la memoria y la organización mapuche sostienen un programa tan sencillo como urgente: defender la vida, el itrofill mongen (biodiversidad) y el derecho a decidir sobre el territorio.
Este 12 de octubre de 2025, nuevamente las comunidades indígenas salieron a las calles en todo el continente. En Santiago, Concepción, Temuco, Valdivia y Chiloé, entre otras ciudades, se realizaron marchas, actos culturales y encuentros que reunieron a organizaciones mapuche, aymaras, rapanui y de pueblos andinos, acompañadas por movimientos socioambientales y de derechos humanos.
En los discursos resonó el rechazo a las industrias extractivistas, la defensa de los ríos y bosques, y la urgencia de construir alianzas entre pueblos frente a los tiempos de crisis climática y despojo. Las manifestaciones, masivas y diversas, se desarrollaron sin presencia de partidos políticos ni representantes de la burocracia estatal, reafirmando la autonomía de los pueblos frente a los discursos oficiales.
Demandas que nacen desde los territorios
En la marcha de Santiago, vocerías de organizaciones juveniles, estudiantiles y territoriales entregaron una carta dirigida al Presidente de la República, exigiendo respeto al derecho a manifestación y denunciando la represión vivida en años anteriores.
Entre las demandas de los organizadores destacan la exigencia de verdad y justicia para Julia Chuñil y Maximiliana Amaro, el fin de la militarización en Wallmapu, la libertad de los presos políticos mapuche, y la protección de los defensores ambientales.
Las organizaciones también demandaron restitución de tierras usurpadas, reconocimiento de derechos educativos y culturales, y autonomía política y económica de los pueblos originarios.
Un mensaje desde el Wallmapu al mundo
Cada 12 de octubre se recuerda el inicio del colonialismo, pero también la persistencia de los pueblos originarios. El Día de la Resistencia de los Pueblos se consolida una vez más como una fecha de reflexión y movilización continental, donde el Wallmapu y toda Abya Yala se levantan para decir que el desarrollo sin justicia es solo otra forma de conquista.*****FIN*****