«El problema que se ha dado hasta ahora radica en la forma en que se está diagnosticando la neurodivergencia. Prácticas que ignoran los marcos culturales como el kimeltuwün (lugar de enseñanza) y tienden a patologizar las diferencias legítimas. La falta de formación intercultural entre los profesionales refuerza la percepción de ‘déficit’ donde existen diferencias culturales», dice un comunicado de UFRO
Temuco, 13 de septiembre de 2025. — La Universidad de La Frontera (UFRO) y la Universidad Tecnológica de Auckland de Nueva Zelanda lanzaron un plan de investigación para replantear el abordaje de la neurodivergencia en pueblos indígenas. La iniciativa se enmarca en un acuerdo de colaboración internacional y propone integrar visiones culturales propias en la investigación y en el diseño de políticas públicas en salud mental.
Según un comunicado de UfRO, el problema que se ha dado hasta ahora radica en la forma en que se está diagnosticando la neurodivergencia. Prácticas que ignoran los marcos culturales como el kimeltuwün (lugar de enseñanza) y tienden a patologizar las diferencias legítimas. La falta de formación intercultural entre los profesionales refuerza la percepción de “déficit” donde existen diferencias culturales.
“Percibimos que hay un problema -principalmente en Chile- que es cuando las personas son diagnosticadas con alguna neurodivergencia, también son diagnosticada con un déficit cognitivo”, afirma la directora del proyecto Carolina Orellana del Departamento de Salud Mental y Psiquiatría UFRO.
Con este proyecto “apostamos -desde lo que hemos venido estudiando- de que no se trata de una discapacidad cognitiva, lo que sucede es un “no entendimiento” respecto de lo que está ocurriendo culturalmente en una persona indígena o de pueblos originarios y esta problemática es necesaria de conceptualizar”, explica.
A su vez, la investigadora, Karina Sandoval del Departamento de Administración y Economía de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Empresariales afirma que el objetivo está puesto “en ampliar el estudio y el análisis en las tres comunidades – maorí, aymara y mapuche- y lograr la co-creación de instrumentos comunes para que esta tecnología sea un prototipo que tenga validación y nos permita conectar las culturas”.
Al lograr precisar como la cosmovisión se detalla en aspectos evidentes -por ejemplo- de cómo se están interpretando desde la sabiduría ancestral aspectos de la neurodivergencia, las investigadoras quieren poner a disposición pública esta información crucial, que permita incorporar la evidencia en pautas de evaluación que se hacen en ámbitos de salud y educación para pueblos originarios.
Y de esta manera entregar a los tomadores de decisiones y a los agentes de salud y educación una solución centrada en el co-diseño, implementación y validación de una metodología participativa para la adaptación y evaluación de tecnologías digitales diseñadas para la salud comunitaria, apoyo social y educación en contextos rurales e indígenas.
Para la directora de Innovación y Transferencia Tecnológica UFRO, Dra. Paola Durán, esta es “una oportunidad muy valiosa para recoger antecedentes pertinentes y necesarios para que nuestra investigación aplicada siga diversificándose en temáticas de interés, a la vez que nos permite colaborar con instituciones de prestigio y que poseen líneas de investigación de madurez, de las cuales podemos aprender”.
Las personas que se les «considera neurodivergentes o neurominorías (Doyle, 2020)» tienen «diferencias cerebrales pueden ser sutiles e imperceptibles para el lector o muy evidentes. Las personas neurodivergentes presentan fortalezas y dificultades diferentes a las de sus pares neurotípicos (Cleveland Clinic, 2022)».
Con información de:
- https://www.mentalhealthacademy.com.au/blog/neurodiversity-neurodivergence-and-being-neurotypical
- https://www.ufro.cl/noticias/ufro-y-universidad-tecnologica-de-auckland-abordan-proyecto-de-neurodivergencia-indigena/